De origen oriental y considerado a menudo un fósil viviente, es una de las primeras plantas utilizadas en fitoterapia y en la medicina tradicional china.
Su extracto es utilizado desde hace tiempo en el tratamiento de trastornos circulatorios -como várices o hemorroides–, asma, tinnitus, vértigo o cefaleas.
Tendría efectos beneficios para el control de ciertos signos asociados a la vejez, como la pérdida de la memoria y el deterioro cognitivo, y la demencia.
Está en la presencia de ciertos extractos, entre ellos terpenoides, flavonol glucósidos y proantocianidinas que tendrían propiedades farmacológicas.
Entre estas propiedades figuraría la capacidad para activar las plaquetas y aumentar el flujo sanguíneo periférico y cerebral.
Además, podría modular algunos neurotransmisores, como la serotonina y la noradrenalina. Con lo cual, podría ser un aliado en distintos tratamientos para condiciones de salud mental, como la depresión.
Más efectos
El sitio Mundo Deportivo enumera los siguientes:
- Bloquea la acción de los radicales libres en el organismo. Por lo cual es bueno para luchar contra el envejecimiento celular.
- Aumenta los niveles de energía en el cuerpo y ayuda a combatir el cansancio y la fatiga.
Cuándo se notan sus efectos
Para una opción terapéutica, la recomendación es elegir comprimidos con su extracto en las dosis adecuadas. Un médico con orientación naturista o en fitoterapia dará las indicaciones precisas.
En cuanto a las mejorías, estas podrían notarse a partir de las cinco semanas de tratamiento. Aunque dependerá el caso a tratar.
También pueden prepararse infusiones con hojas disecadas aptas para consumo humano que pueden adquirirse en dietéticas o herboristerías.
De todos modos, hay que tener en cuenta que estas sugerencias son orientativas y no sustituyen la indicación profesional.